El año ha comenzado como era de suponer, ni a los clientes les han traido los reyes un buen tratado de las buenas maneras ni un diccionario de la lengua española ni a nosotros más paciencia para aguantar los desatinos y mal humores de los susodichos y de los jefes...en fin...¡Qué se le va a hacer! Era algo que ya se sabía, no nos va a coger ahora por sorpresa.
Las primeras anécdotas con las que nos hemos encontrado en estos primeros días de trabajo han sido muy divertidas:
_ Un cliente me preguntó que qué podía hacer si en su móvil cuando enviaba un mensaje le decía que el mensaje estaba fallecido...(lo primero llamar al sacerdote, la funeraria, la familia, ya se sabe...).
_Otro cliente increpaba porque no se le estaba aplicando una promoción de fin de semana cuando era miércoles...(uno empieza con las fiestas y acaba siempre en domingo).
_También ha habido casos simpáticos sobre tarifas...tras informar profusamente acerca de las tarifas por las que podía optar...pregunta el señor...pero y...¿cuánto me cuesta llamar a un Nokia? (yo aquí ya comunico...pi...piiii...piiiiiiiiiiiiiiiii)
La verdad es que también hemos disfrutado de buenos ratos, hemos tenido llamadas de clientes educados y amables que nos han felicitado las fiestas, el año, que nos han deseado que nos trajesen muchas cosas los reyes...pero la triste conclusión a la que se llega es que el 78% de los clientes son muy muy muy pero que muy mal educados, que no te escuchan y que además te corrigen sin saber de qué hablan _si ya lo sabes, o sabes más que yo para qué llamas_ creo que muchos tienen pocos hobbies a los que dedicarse y toneladas de tiempo en el que aburrirse y una falta de cariño enoooooooooooooooorme.
14 de enero de 2008
LA PRIMERA EN LA FRENTE
Etiquetas:
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